La metamorfosis del Abandono.

Y abandonar hijos del tiempo en el camino
como esferas de metal que caen de las nubes
en dìas de invierno.

Brillantes sobre el suelo, tus ojos.
Abandonarè.

Laura. 31deMarzo09

Si tuviera suerte.

Si tuviera suerte,
èste texto te tocarìa el alma, al menos.
Y este amor berreta se acabarìa acà.

Si tuviera suerte,
Cuando vibra el celular y es tu nùmero el que aparece,
èste corazón golpearìa un poco menos
que mil tormentas de arena.
(Y, probablemente, serìa menos vulnerable a la realidad)

Si tuviera suerte,
hoy no estarìas con la otra viendo una pelìcula
Aprovechando que llovizna.
Abrazados.
Y yo no estarìa acà, esperando que esta vida termine
para, en la pròxima, volvernos a encontrar.

Si tuviera suerte,
Esto que relato no serìa la foto de una tristeza.
Y sin lugar a dudas,
Le exigirìa a los Dioses, una frase màs atrevida
que el “te amo” que no pararìa de repetirte
mientras vos me usurpàs la mitad del colchòn.
Y la almohada ya no llorarìa de soledad.

Si tuviera suerte,
Cada vez que me hablan de amor
Me pondrìa en Off,
Para evitar la sensación de yacer
y, con suerte, renacer en algùn momento.
Y empezarìa a buscarte
En otras sonrisas y en otras camas,
Pero últimamente estoy fuera de servicio.

Y si tuviera suerte,
En unos siglos, tal vez, estaremos
contàndonos, al oìdo, cuentos de amor que no mientan.
Pero mientras tanto, mandale cariños a tu novia.
Porque ya no puedo decirte nada màs.

Si tuviera suerte,
sabrias en tu corazòn
que, en esto que te escupo,
te estoy diciendo la verdad.

Con suerte, tenga suerte.

Y ya no dudarìa de las tormentas de arena en plena ciudad.

Alguna Biblia.

Yo me detengo en su actitud,
Relampagea, chistosa.

Me fastidian estos tipos que creen ahuyentar a Plutòn con un soplido de fumador.
Que pobreta la metodologìa del soñador de hoy, seferìnes rebeldes.

Ràpidos, casi fugaces,
como liebres-libres
chispean porquerìa,
como drogas matutinas.

Bah, serà que no me quedan espejos de la Nueva Amèrica.
Y por eso, ando agreteando a lo dadà.

El agotado Abaddon, tu Dios, no vino a recalcar posibles errores.
Es una pena, era adorable.
Confieso que en noches de borrachera,
hasta me caìa simpàtico.

Un poema apocalìptico y prosmicuo debe decirte:

“No es que te desprecie, amiga mìa
Pero la Duquesa del Infierno
Debe proteger cierta reputaciòn…
No todos las coronas se han forjado de oro”



Y para hacer una despedida añorable
Ven, pongamos nuestros pasos anteriores en la balanza del Olimpo.
Veremos quien sobreviviò sin arrepentirse a las tormentas que vivimos.



Han leìdo un pasaje en la Biblia hallada entre la multitud de pescados a comer.

Laura.-
20deFebrero2009.

El Rìo.

Me arremanguè el pantalòn y mis tristezas màs puras.

Tomè valentìa y crucè el rìo tormentoso de mis dìas.

Què calamidad!



Las pantorrillas, dèbiles y lastimadas, sienten el rozar de las piedras.

Filosas piedras que conocès bien.

Y cuàndo llegarè a la orilla?



Està tan lejos que apenas puedo ver que sigue allì su claridad.

El viento susurra al oìdo del desprotegido,

Su consejo, su pudor.



En la mañana dejaremos la tierra colorada

Y asì, nuestras tormentas dejaràn de resonarnos

Recordándonos miserias de mil vidas anteriores.



Y ya no puedo caminar.

Estoy anclada en la mitad del rìo.

Creciò.


Creciò el rìo, y no mis dudas,

mis miserias,

mis torpezas.

Todo està dicho: No soy buen anzuelo.

Laura.-
20deFebrero2009.

Crònica de una noche eterna.

Otra noche donde, tirada en un colchòn de penas,
fui valiente al comenzar mi suicidio de nuevo.
Otra vez quedè en deuda con el olvido.

Quiero ser clara: no hace falta que cuidès mi corazòn.
Si bien sabemos que te fuiste con el premio mayor.
Ella. Y vos tambièn.
Y no te digo nada, mi amor.
Pero te cuento un secreto:
Si fuera valiente, te odiarìa.

El suspenso vivido,
(Tan lento y tan narcòtico)
El que escupìs en tus palabras
Y dos horas esperandote, es un veneno.

Veneno que es marea.
Me marea tu marea.

Porque te quiero tanto como te odio.
Y de fondo se encuentra Ivàn, aconsejandome.
Pero los cuentos contados por otros no ayudan en estos casos.
Me embarra màs la cancha y tu cara aparece en mi cabeza,
como si fuera magia.
Es magia.
Este momento y yo. Y vos tambièn.

Y estas noches en que pienso en vos, pareciera que no tuvieran un final.
Pero te lo admito, che.
Que cometì el segundo error de mi vida, està màs que claro.
Fijarme en alguien que puede tener
a la que quiera al lado de su corazòn.
Y de su colchòn.

Y yo acà, pensando en que podrìa haber pasado.
Y vos allà, durmiendo con mi enemiga al lado.
Me desangro pensando en lo feliz que debe ser.
Ella. Y vos tambièn.

Converso con el techo y èste me verdugea de preguntas.
Preguntas que no me dejo de hacer.
Mirar el techo pensando en alguien es, siempre, sìmbolo de tristeza.
Y trae a mì, instantaneas de momentos.

Y sabès? Ayer recordè las charlas en el tren.
No creo que recuerdes las charlas en el tren.
No sè si lo sabràs, pero en ese momento yo te amè.
Una y otra vez.
Tanto que asustaba.

Ahora,
paso con el (.....) por (.....)
Con la pobre y minusvàlida esperanza de verte.
Y no puedo olvidarme de vos.
Y en cada parada busco tu cara entre las caras tristes de la gente.

Presiento que estàs buscando el momento
para contarme lo que yo ya sè.
Y no tengo consuelo alguno como para ahuyentar fantasmas del pasado
que vuelven a repetirme que hay corazones que no merezco.

Y tres dìas a la semana recuerdo que amè corazones que no merecìa.
Ni en esta vida ni en ninguna otra.
Y presiento que vos vas a ser una de esas personas.

Esta es la crònica de una noche màs.

Poder&Cansancio

Avisale a papito (demonio fugitivo que duerme con mamà).

Ese sì que nos va a ayudar.

Ay!

Tantas plegarias y ninguna respuesta.

Dios no quiere mandarnos el pedido.

Y nos da veneno, en vez de làgrimas.

Detesto ser dèbil ante su presencia.

Laura.-
20deFebrero2009.

Los monitos.

Hay monitos y monos.-

Son grupejos, y uno va (Dios sabe porque) en busca de algùn que otro desahuciado como uno.

Uno entra y sale, cuestiones sin resolver.
La soledad suele ser una amante grosero (Dirìa un amigo)

Yo conocì todos los habitàculos que el amor me supo ofrecer, pero no quepo en ninguno.

La conformidad de sus paredes pintadas de mentira (felices, como todas ellas) no supieron hacerme descostillar y quedè sin voz, mi sombra rogando por las calle que prometen un amigo.

Ay! Si pudiera librarme de mi inconformidad, hoy podrìa ser feliz.

Monitos que no bajan del tobogàn.
Arquetipos de mentirosos Sarmientos.
Hoy no hay sal que la lengua soporte.

La Tiranìa del Turco.

Milagros de sal y limòn, cuànto tiempo me sobra para huir?
Si ya encendiò la mecha el Mesìas del Diablo.

Gitana hecha de Girasol rogà por mì,
que cuando la pasta haga pista en mi cabeza,
ni todo el buen vino de la Gran Francia
va a sabotearme las ganitas locas
de agrupar mis dineros y meter mi cabeza
en una bolsa de droga baronesa
y con bastante prestigio de puta.

Deslenguada, esdrùjula y homicida.

Admito que mi tumor,
tantas veces ridiculizado,
es un tanto dèbil en cuanto se enfrenta
con el Rey en su castillo de chapa.

Te saludo y comulgo con la NovaStar.

Adiòs Turco fifiriche, nos vemos cuando nieve de nuevo.

La Super-Alemanita

La alemanita esplendorosa jugò con sus majestades en plena època de celibato. Què tiempos aquellos. La alemana, brusca, entendiò que las melodìas de sus pretendientes no eran màs que huecos de amor. Y una mañana, aùn con luna, la extranjera se encerrò en la celda de sus vanidades màs puras (porque la furia ajena, pocas veces la lastima) y dejò que el tiempo le erosione la cara. Aliada de cualquier ejèrcito, logrò escaparse de su misma culpa y colgò su esperanza de un caballo sin princesa. Caballo pobre. Despuès de años eternos, viò su ciudad alejàndose por el Norte y unas dos làgrimas recorrieron su cuerpo como dicièndole Adiòs a la alemanita que alguna vez fue.

No importa que los reyes pases sus mandatos ni que los hijos tengan sus propios hijos... Siempre es tiempo de abandonar la aldea y darle guerra a algùn invasor precoz.

En el Medioevo de mi alma no va a haber paz. Nacimos para ser Libres.