• Adolfito II

(Y le clavè el cuchillo en el corazòn, como tantas veces me lo clavò a mì. Què hermosa sensaciòn. Su sangre era màs roja de que lo que imaginaba)

Puedo ser yo el que acabe con tu familia. Soy todo lo que soy y puedo perderlo si me hacès daño. Incluso mis modales, que son màs fràgiles que tus manìas y tus julepes de bolsita de pegamento.
Soy de los que se dejan dañar por que sienten placer al ser lastimados. Pero no provoquès. Tengo instinto de animal, una vez que mato ya no puedo sacarme el gusto de sangre del hocico. Y quiero màs. Y màs.
Puedo matar por gusto. Por deber y por opciòn. Me pediràs ayuda, tal como profetizò Ricky, y yo te darè la mano. Pero me burlarè. Por que no soy perfecto. Soy humano y tengo la venganza clavada en los huesos. Por que mato si me matan. Y lo ùltimo que hago si me matan es sacar fuerzas para matarte a vos. Por que mato para no morir. Y me gusta. Soy un alter ego super especial. Cariñoso, amable pero soberbio, egoìsta y manipulador. Yo acà, hago lo que quiero.

Y ella es buena, pero rebalsa de aguantarse todo. Y acà salgo yo y ella. Dos asesinos en potencia a los que poco nos importa la bondad. Nosotros le cobramos deudas. Y ella es còmplice. Por què nos dejo salir? Por que la lastiman y nosotros salimos a defenderla cuando ya no puede mantenerse de pie. Y la queremos, como nadie nunca la quiso. Somos capaces de lastimarte, hacerte desangrar, verte morir y retorcerte del dolor, solamente para protegerla.


Y yo los quiero. Por que me cuidan. Por que estàn.
Pero cuando se quiere, se lastima. Y no puedo dejarlos libres. Los ato. Los adentro en el fondo de todo mi yo.No me gusta que maten. Pero a veces necesito que lo hagan. Que lastimen un poco a los demàs. Yo no quiero ser la ùnica que salga herida de todo esto. Èse es mi pecado, mi ùnica crueldad. Son ellos mis vengadores. Si los ves cerca, tememe. Ando de mal humor y odio al mundo.
Pobre el que me tilde de hipòcrita. Merecen ser colgados de la horca màs violenta. Uno de mis tantos dolores es sufrir por no serlo. Hoy, mis amores.. agarrarìa un tramontina y se lo clavarìa en el corazòn a quien lo merezca. A los necios, a los despechados, a esos muchachitos de corazòn de lata, a los que me rompen las pelotas. A los que suponen ser superiores. Me gustarìa verlos clavados, cual Jesùs, desangrandose lentamente. Ver como su dolor, disfrutar su dolor y tomarme su sangre. Hoy disfrutarìa de la muerte. Hoy puede ser que te mate de mi memoria.


Vamos a la raìz: sabemos bien que la disfrutaste (dios mìo, cuànta bondad desperdiciada!), tambièn sè que es la que escucha cuando tenès un problema. Aquella que te aconseja y que vos, llamàs amiga.
Ustedes para ella, no son nada. Son dèbiles que sòlo saben lastimar. Y son cobardes, mucho màs que yo que me oculto en lla. Son nada, muchachos. Y hoy tiene el valor para decirles que se pueden ir al carajo. Ustedes y sus familias. Ustedes y sus novios. Ustedes y sus bromas de mal gusto. Ustedes y sus problemas.
Querido y querida, ella se caga de risa de vos. Tu inùtil manera de acecharla. De su valentìa de grupete de amor atroz, de sus canalladas hiper-infinitas y de sus tantìsimas negligencias apodadas amorcitos. Seguramente, ella, puede ser todo lo que vos quieras que sea. Pero te aseguro que convive con sus demonios tranquilamente, como vos con tus acartonados papitos.
Yo, por mi parte, no piso el palito, por que voy con la verdad. Yo, soy todo lo que ustedes desearìan ser.

Adolfito.-